lunes, 7 de septiembre de 2009

Casa Ramón y Eva.

Una de las premisas para construir una vivienda ecológica es tener en cuenta no solo el gasto energético durante su uso , sino también el gasto energético necesario para obtener y transportar los materiales con los que se construye y la cantidad de residuos que se generen en obra. Sin duda la madera es el material óptimo ya que no genera CO2 el producirlo, solo se produce al transportarlo. Desgraciadamente la industria maderera no esta enfocada para la construcción en este pais y se tienen que importar de fuera. Sin embargo sigue siendo rentable para la naturaleza construir con madera.
Es exigible el sello FSC o similares, los cuales aseguran que por cada arbol que se corte se plantarán 3 en el mismo bosque, lo cual garantizará la supervivencia de esos fuentes naturales.
Esta vivienda se han construido enteramente en madera, tanto para la fachada, como para la estructura y particiones. En este tipo de viviendas la estructura se confunde con la fachada y las particiones, se realiza con montantes de madera separados 50 cm. Entre ellos se puede introducir el aislante (lana de roca o si queremos una solución más saludable fibra de cáñamo o corcho). Este entramado va trasdosado con paneles de madera tipo MDF (interiores) o tipo OSB (mayor resistencia al exterior). Sobre estos muros de carga de madera se puede aplicar cualquier revestimiento, en nuestro caso piedra del lugar para los exteriores y placas de yeso en el interior.
Los forjados se construyen con cabios de madera estructural cada 50 cm y friso para arriostrarlos y dar un acabado acogedor. Sobre el friso se coloca el aislamiento pertinente y el suelo final. La cubierta se ha realizado sobre onduline y con teja tradicional.
La instalación de agua caliente sanitaria y la calefacción se apoyan con unos paneles solares. En el salón se proyecta igualmente una chimenea que ayuda a calefactar el salón de una manera natural.
La instalación de saneamiento es separativa, lo cual quiere decir que tiene unas bajantes propias para las aguas negras y otras para las aguas pluviales. La casa tiene un depósito de agua enterrado donde van a parar las aguas pluviales para un posterior uso en la parcela. Además tiene otro depósito para aprovechar las aguas grises (de la ducha y lavabos) y reutilizarla para rellenar las cisternas.

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